Esta agrupación de teatro fue fundada en el 2003 y este año trae una obra que busca replantear la narrativa inmigrante en esta nación: “Cross Roads: Reframing the Immigrant Narrative (Work in Progress).

El grupo LaMicro Theater  presenta una obra dirigida por Tara Elliott que navega por los testimonios personales de Valeria Avina, Braulio Basilio, Nicolle Márquez, Andrés Pina, Paola Poucel y Zuleinette Ralat. Todos son actores profesionales.

Esta obra bilingüe, que cuenta con el aporte de la dramaturga Raquel Almazán y de Karim Rivera Rosado en producción, se presentará los días 13 y 14 de junio, a las 8 P.M. en Teatro LATEA del bajo Manhattan. Luego vendrán más funciones.

Hablamos con los productores y co-fundadores de LaMicro, Berioska Ipinza y Pietro González. Ipinza, quien vive en Sunnyside, Queens, respondió primero.

¿Por qué debemos ver “Cross Roads”? 

Cross Roads es un proyecto en que la dramaturga Raquel Almazán y la directora Tara Elliott trabajarán creando un espacio donde los actores puedan expresar su experiencia como inmigrantes. Nos da la oportunidad de escuchar las experiencias de inmigrantes en este país. Experiencias similares y difíciles de las que debemos dialogar, escucharnos y ser solidarios.

¿Cómo hallar una nueva narrativa inmigrante?

Estamos trabajando con actores que hablan de sus experiencias personales como actores. Ser inmigrante es tomar la decisión de buscar nuevos rumbos y, ¿por qué no?, una mejor vida. Seguiremos explorando.

¿Cómo fue la selección de actores?

Enfrentaron una audición y tuvieron la valentía de hablar acerca de sus experiencias personales. Son actores de México, Chile, República Dominicana y Puerto Rico. Aunque sus experiencias son diferentes, hay cosas en común.

¿Qué es lo más lindo de hacer teatro?

Poder disfrutar y encontrar libertad y oportunidades de expresión mental y corporal. El teatro nos ayuda a ser libres. Es un trabajo que se hace en colectivo y eso es fundamental.

Inmigrantes y actores latinos de LaMicro Theatre. Foto cortesía

Pietro González, co-fundador y productor de LaMicro, también es actor. Para González “el teatro es muy importante porque nos ayuda a reflexionar, analizar y descubrir herramientas para poder lidiar con asuntos de la vida diaria ya sean políticos, sociales y también emocionales. El teatro nos ayuda cuestionar y crecer como seres humanos y es un micromundo donde hay que aprender a trabajar en grupo. Generar ideas, respetarse, aceptar desafíos, ser autocríticos”.

Sobre la selección de las obras de LaMicro, González dijo: “Tenemos diferentes medios. Recibimos textos, propuestas y las elegimos basados en diferentes criterios.  Por ejemplo, si tienen que ver con las realidades de nuestro público, las montamos o hacemos lecturas dramáticas. Así pasó con “Nanas”. El autor Leonardo González nos compartió la obra y decidimos que era un tema adecuado para Nueva York.

Más información en lamicrotheater.org

Marcela Álvarez