Por Marcela Álvarez —
Un evento deportivo y de entretenimiento global como el US Open agrupa mil y una historias. Y entre esas historias están las de corte local, las que nos tocan muy de cerca.
“Celebrar el poder del tenis” es el mensaje oficial del torneo y nada más verídico que lo visto en Jackson Heights. Toca empezar por el principio.
La pandemia de COVID 19 también nos dejó, si cabe decirlo, cosas positivas. Gente que empezó nuevos hábitos, nuevas carreras, aprendió o mejoró un idioma, un instrumento musical, abrazó un nuevo deporte, unos se mudaron, otros retornaron, etc. En 2020, el tenis desembarcó con fuerza en este multicultural barrio de Queens donde la consigna del US Open se ha cumplido al pie de la letra.
Ubicado en las calles 77 y 78 entre avenida 34 y Northern Boulevard, Travers Park en Jackson Heights fue punto de encuentro de personas que cada día se reunían para hacer yoga, zumba, meditación, escuchar música, jugar ajedrez, charlar y, aprovechando las canchas de Garden School, jugar tenis. Era la luz en medio de la oscuridad.
Hoy, cuatro años después, existe una dinámica comunidad de tenis que aprovecha cada día para jugar, compartir, socializar, etc.
Al frente de este grupo está la colombiana Mónica Vergara, ex basquebolista de alto rendimiento en su Bogotá natal. Un día tomó la raqueta y no la soltó más. Igual pasó con su esposo Rafael y su hijo Jordan, de 16 años.
“Somos una familia grande, una comunidad de aproximadamente cien personas que nos dedicamos solamente al tenis porque es un deporte que nos ha ayudado a mantenernos juntos desde la pandemia. Cuando no podíamos hacer nada, esta pequeña área, que es como nuestra segunda casa, fue nuestro reencuentro, nuestra salvación por decirlo así desde que empezó la pandemia”, dijo la joven madre Vergara muy emocionada al recordar los primeros pasos de su comunidad tenística.
Este sábado de agosto aquí también hay torneo, como en Flushing. “Hasta hoy hemos realizado dos y tres torneos al año, llevamos cuatro años haciéndolo, sin ningún costo, lo hacemos por mantener a la comunidad unidad. Este año contamos con un poquito de apoyo de la USTA, nos donaron bolas, toallas”, añadió Vergara.
En medio de la alegría, hay preocupación por el estado de las canchas. Necesitan terapia intensiva urgente. “Hacemos basicamente un llamado de atención a las empresas, a los políticos locales, a quienes estén en disposición de ayudarnos…. sería muy bueno…. que nos ayuden a reparar el piso, que está roto, a pintarlo por que lleva muchos sin cuidado,” dijo Vergara.
En este grupo destacan Enrique Santander y Luis Valverde, otrora fanáticos del fútbol que hoy viven para jugar tenis, igual los Jackson Heights Tennis Bad Kings. También están Carlos, Jasmine, Alejandro, Jorge, Amelia, Pablo, Néstor, Jessica, nombres que escuchamos al azar.
Muchas gracias por tu apoya y tiempo
Hermoso artículo sobre el tenis todo lo que este deporte puede hacer por la comunidad.
Me alegro por ellos, les deseo lo mejor….pero en mi memoria no tengo bonitos recuerdos de este grupo….las canchas eran de ellos y punto, había q tener mucha suerte para poder jugar…y la señora q está al frente del grupo uy se creía “el hoyo del queque” como decimos en chile….
wow que bonito – siento la emocion del tenis leyendo este articulo