
Las protestas a favor del estudiante Mahmoud Khalil quien abogó por el cese al fuego en Gaza y la creación de dos estados: uno para Israel y otro para Palestina.
Mahmoud Khalil, estudiante de la Universidad de Columbia, en Nueva York, se ha convertido en la primera víctima de la nueva política del presidente Donald Trump, que prometió acabar con las protestas estudiantiles y amenazó con deportar a los estudiantes extranjeros que fueran “simpatizantes de los terroristas”.
“Es la primera detención de muchas que vendrán”, dijo Trump en su plataforma Truth Social, y acusó a Khalil de ser un “estudiante radical pro-Hamás”.
Khalil, refugiado palestino criado en Siria y con pasaporte de Argelia, fue detenido por funcionarios del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), según informó su abogada, Amy Greer.
Los agentes se presentaron en su casa, una vivienda propiedad de la universidad, cuando Khalil y su esposa acababan de regresar de una cena de Ramadán, y allí le comunicaron que su visado de estudiante había sido revocado y se lo llevaron arrestado a Nueva Jersey.
De ahí fue trasladado a Luisiana, a más de 2.000 km de distancia, y sus abogados denunciaron que no les permitieron comunicarse con él directamente.
El universitario, estudiante de posgrado en la escuela de Asuntos Internacionales y Públicos, está casado con una mujer estadounidense, que además está embarazada de 8 meses, y cuenta con un permiso de residencia (green card) que, según dijeron los funcionarios de inmigración a su abogada, también había sido revocado.
El intento de deportación fue bloqueado temporalmente por un juez federal, quien presidió una audiencia de emergencia. El juez Jesse Furman ordenó que al estudiante se le permitan llamadas privadas con sus representantes legales y está estudiando si debe de ser trasladado de nuevo a Nueva York.
El diario The Washington Post informa que, hasta ahora, la única justificación es una determinación del secretario de Estado, Marco Rubio.
La citación ante una corte de Luisiana indica que podría ser deportado con base en la sección 237 (a)(4)(C) (i) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, que establece que “el secretario de Estado tiene motivos razonables para creer que su presencia o actividades en Estados Unidos podrían tener consecuencias adversas graves para la política exterior de Estados Unidos”.
Rubio declaró a la prensa que Khalil no debió haber recibido Green Card y está en contra de Israel.
Columbia University fue el año pasado el epicentro de las protestas estudiantiles pro-palestinas que tuvieron lugar en todo el país contra la guerra en Gaza y el apoyo de Estados Unidos a Israel, y Khalil fue el principal negociador de la acampada en el campus universitario de Manhattan.
La presidenta de la Unión de Libertades Civiles de Nueva York, Donna Lieberman, calificó la deportación de Khalil de “represalia selectiva y ataque extremo a la Primera Enmienda”. La fiscal general de Nueva York, Letitia James, también criticó la detención del estudiante.
“Ahora nos enfrentamos a la horrible realidad de que uno de nuestros estudiantes, miembro de la comunidad de Columbia, se ha convertido en preso político aquí en Estados Unidos”, declaró Michael Thaddeus, profesor de esta universidad neoyorquina.
“Es un momento funesto para la historia de Estados Unidos”, afirmó Thaddeus en una rueda de prensa con otros 50 docentes. “No debemos avanzar ni un paso más por este camino autoritario”.
Según la Universidad de Columbia, las fuerzas del orden pueden entrar en las instalaciones del campus con una orden judicial, pero negó que la dirección de la universidad hubiera invitado a agentes del ICE.
El Departamento de Seguridad Nacional puede revocar un permiso de residencia e iniciar los procedimientos de deportación contra sus titulares por una amplia gama de actividades delictivas, como el apoyo a un grupo terrorista.
Según Camille Mackler, fundadora de Immigrant ARC, una coalición que ofrece servicios legales en Nueva York, “esto parece una represalia contra alguien que expresó una opinión que no le gustó a la administración Trump”, según publica AP.
Khalil tuvo un papel relevante como negociador entre la gerencia de la universidad y los estudiantes que instalaron el año pasado un gran campamento de protesta en los jardines del campus.
Recortes a la universidad
La detención de Khalil se produce después de que el presidente estadounidense emitiera en enero una orden ejecutiva en la que advertía que se deportaría a cualquier persona implicada en “protestas proyihadistas” y a “todos los simpatizantes de Hamás en campus universitarios”.
El nuevo gobierno de Trump ha acusado a la Universidad de Columbia de no combatir el antisemitismo en el campus, y decidió rescindir una partida de US$400 millones en subvenciones federales a la institución universitaria.
La cancelación de estos fondos “tendrá un impacto inmediato en la investigación y otras funciones críticas de la universidad”, anunció la presidenta interina de Columbia, Katrina Armstrong.
Carly, estudiante de posgrado en Columbia, judía, estadounidense y amiga de Khalil, declaró a la BBC que el detenido es “un ser muy, muy compasivo”.
“Ha sido objeto de muchos ataques en internet, y para alguien que lo conoce a nivel personal es muy doloroso ver cómo lo han tergiversado”, dijo Carly, que se negó a compartir su apellido por razones de privacidad.
Tom Homan, zar de las fronteras, alegó que Khalil violó las condiciones de su visado al “cerrar edificios y destruir propiedades”. BBC