“Todos los días intentaba empezar con energía, pensando ‘hoy voy a dar lo mejor de mí’, pero siempre algo salía mal. Me equivocaba una, dos, tres veces, hasta que perdía la cuenta. Tenía que repetir las tareas una y otra vez, y eso me hacía llorar. Recuerdo que me encerraba en mi cuarto preguntándome: ‘¿Qué me está pasando? ¿Por qué no puedo hacerlo bien? ”, contó Jessica Molina, emprendedora colombiana, tras años de lidiar contra el burnout o estrés laboral crónico.
Este mal de época, es considerado según la OMS como una enfermedad profesional, que ocurre cuando hay agotamiento emocional en los trabajadores y trabajadoras, alto nivel de estrés laboral y que conlleva a una sensación de pasividad, dejadez e ineficacia. Esto puede ser producido por factores como altas exigencias, falta de control y apoyo social.
Cifras de la Revista UNAM Global de la Universidad Nacional Autónoma de México, arrojan que México es uno de los países con mayor prevalencia del síndrome de burnout, superando a China y Estados Unidos, con un 75% de los trabajadores sufriendo de fatiga por estrés laboral. Actualmente, este mal excede al ámbito del trabajo y se instala en la vida cotidiana. Pero, ¿Qué rol juega el factor de género en este agotamiento laboral crónico?
De acuerdo con una encuesta de Gallup 2024, del total de entrevistados a nivel global, el 51% de personas que manifestaron sentir mucho estrés en el trabajo son mujeres. Por su parte, la firma Mckinsey & Company detectó, en su informe Women in the Workplace 2021, que el 42% de mujeres consultadas a nivel mundial padece agotamiento frente al 35% de los hombres. Esto se debe a múltiples factores sociales, pues en general las mujeres enfrentan mayores desafíos que los hombres en el mercado laboral.
El burnout no sólo afecta mentalmente a las personas, sino que también pueden llegar a manifestar dolencias y enfermedades. En ese sentido, la doctora Carolina Aranda, Investigadora del Instituto Regional de Investigación en Salud Pública de la Universidad de Guadalajara, presentó un estudio sobre las manifestaciones clínicas del síndrome de burnout en médicos y médicas de esa institución, determinó que el porcentaje de doctores con síntomas de molestia o enfermedad en los últimos seis meses es más alto entre las mujeres (77.3% con burnout), comparado con los hombres (57.5% con burnout). Estos resultados sugieren que las mujeres parecen sufrir más en términos de molestias y enfermedades asociadas, con respecto a su par masculino.
Ello se debe a que “en América Latina, las mujeres destinan más de la mitad de su tiempo al trabajo de cuidados no remunerados. Esto no solamente afecta su capacidad de competir en igualdad de condiciones en el ámbito laboral, sino que duplica la carga mental con la que tienen que lidiar y limita mucho más sus posibilidades para descansar, desconectar o participar en actividades recreativas”, expresó Georgia Rothe, especialista de género de Pro Mujer, durante una entrevista en el podcast Voces por la Igualdad (Episodio 1, Más allá del burnout: estrés laboral y género – 11 sep, 2024) [Podcast- disponible en Spotify].
Vale mencionar que, las mujeres que experimentan acoso, violencia o incluso microviolencia tienen tres veces más probabilidades de considerar dejar su empleo y cuatro veces más probabilidades de sentirse constantemente agotadas. La baja presencia femenina en posiciones directivas evidencia un sistema que no solo subestima las competencias de las mujeres, sino que también las margina intencionalmente de los procesos de toma de decisiones.
¿Cómo disminuir los efectos del estrés laboral?
Estibalitz Laresgoiti, médica con estudios de posgrado en inmunología y neurociencias, doctora en psicología de la salud e integrante de la junta directiva de Pro Mujer destacó en su participación en el capítulo del podcast Más allá del burnout …- “la importancia de aprender a manejar estas emociones para mejorar la salud y el bienestar general”.
“Para enfrentar este desafío es importante un buen descanso, que no solo previene el aumento de los niveles de estrés, sino que también ayuda a mitigar el impacto del estrés crónico en la salud”, señaló Laresgoiti.
Aconseja ejercitarse regularmente, puesto que es un remedio natural, ayuda a reducir la fatiga y promueve la liberación de beta-endorfinas, lo que contribuye a una mejor sensación de bienestar.
Laresgoiti también enfatiza la relevancia del apoyo social, que puede amortiguar significativamente el estrés al proporcionar una red de apoyo afectivo. Por su parte, la terapia psicológica también es una herramienta eficaz para prevenir y tratar el burnout.
Sobre Voces por la Igualdad:
Voces por la Igualdad es un podcast de Pro Mujer para celebrar las conquistas, analizar los retos y trazar caminos para cerrar las brechas, que aún limitan el potencial de las mujeres de América Latina. Más información aquí.