
Comprar tu primera vivienda es una gran satisfacción y la mejor forma de invertir en el futuro. Foto cortesía
Con las tasas hipotecarias en aumento y la creciente competencia, muchos compradores primerizos se sienten abrumados ante la idea de comprar una casa. Sin embargo, una buena preparación puede brindarles la confianza necesaria para tomar decisiones informadas. Tener en cuenta los gastos adicionales y conocer las opciones de préstamos y subsidios más favorables son pasos esenciales que pueden hacer una gran diferencia.
El panorama es confuso, por eso Felton Ellington, Gerente de Prestamos en Chase Home Lending, comparte algunos consejos que puedes tomar para educarte, prepararte y no dejar que el mercado actual te desvíe de tu propósito.
- Considera los costos adicionales: Más allá del pago inicial, debes tener en cuenta los costos de cierre, que se utilizan para pagar tasaciones, inspecciones y otras tarifas, y pueden ascender hasta un tres por ciento o más del precio final de compra. Estos servicios son cruciales en el proceso de compra de vivienda. Investiga programas de asistencia como el Homebuyer Grant de Chase, que es ayuda económica de hasta $7,500 que puede ser aplicada para bajar la tasa de interés y reducir los costos de cierre.
- Mantén un presupuesto mensual: Ser propietario de una casa conlleva muchas responsabilidades, más allá del pago de la hipoteca, como costos de mantenimiento, impuestos sobre la propiedad, etc. Antes de comprar, los posibles compradores deberían “practicar su pago” para tener una idea realista de lo que implicará tener una hipoteca. Esto los ayudará a estar preparado tanto financiera como mentalmente para asumir esta inversión.
- Obtén la precalificación: Trabaja con un asesor de préstamos de confianza para determinar cuánto puedes pagar y obtener una precalificación para un préstamo hipotecario.
- Revisa tus calificaciones: Antes de comenzar el proceso de búsqueda de vivienda, colabora con un prestamista para evaluar cuánto puedes pagar, tus calificaciones y obtener una precalificación para un préstamo hipotecario. Asegúrate de tener en orden todos tus documentos, como declaraciones de impuestos, recibos de sueldo, formularios W2, etc., para que tu prestamista los revise y determine tus calificaciones. Además de los documentos de respaldo, los prestamistas considerarán tu puntaje crediticio y tu índice de deuda a ingresos (DTI). Es importante mantener una buena salud financiera, realizar pagos a tiempo y evitar grandes compras al solicitar una hipoteca.
- Compara opciones: Busca las tasas más bajas disponibles. Algunos compradores son reacios a comparar tasas porque temen que esto afecte su puntaje de crédito. Sin embargo, las consultas de crédito realizadas por diferentes prestamistas hipotecarios se tratan como una sola consulta en tu informe de crédito, siempre y cuando se realicen dentro del mismo período de 45 días. Esto significa que cinco prestamistas diferentes podrían consultar tu crédito en una o dos semanas, y el impacto sería el mismo que si lo revisara un solo prestamista.
- Aprovecha la relación con tu banco: Muchos bancos ofrecen tasas con descuento a sus clientes actuales que cumplen con ciertos criterios, así que mantente atento a las opciones de precios preferenciales que ofrece tu banco.