El alcalde de la ciudad de Nueva York desde el 2013, Bill de Blasio, quiere derrotar al presidente Trump y convertirse en presidente de los Estados Unidos.

¿Cómo?

Implementando sus logros y fortalezas a nivel federal: defensa aguerrida de los inmigrantes, seguro de salud asequible, acceso gratis a pre-kindergarten, días de enfermedad y de maternidad pagados, el aumento del sueldo mínimo a 15 dólares la hora, y la reducción de crímenes violentos en esta ciudad.

Al presidente Trump no le gustó la idea y en un Twitter lo catalogó de “payaso”. Tanto el presidente Trump como el alcalde de Blasio han demostrado que saben ganar, inclusive cuando las encuestas no están a su favor.

Las debilidades del alcalde de Blasio son: su intento fallido de traer a Amazon a la ciudad de Nueva York, el no poder resolver la crisis de vivienda pública y el haber sido investigado por mal manejo de fondos en su campaña a la alcaldía.

Su esposa, Chirlane McCray, es de raza negra y eso le puede ayudar a obtener votos.

El candidato de Blasio no pierde el tiempo y este viernes se desplaza al estado de Iowa en busca de un público nacional.

Esta mañana sacó un vídeo en el cual dice que ha derrotado y sacará de la silla presidencial a Trump, repartirá mejor el dinero y sus políticas progresistas favorecerán a los pobres.
Hasta el momento hay 24 candidatos demócratas a la presidencia de los Estados Unidos y se enfrentarán en las elecciones primarias. Los más opcionados, por ahora, son Bernie Sanders y Joe Biden.

El contralor de la ciudad de Nueva York, Scott Stringer, quien desea ser alcalde, le deseó lo mejor a de Blasio, pero “ojalá que su campaña presidencial no se aleje de los problemas que enfrenta la ciudad de Nueva York”.