Los gobiernos de Estados Unidos y Panamá firmaron un acuerdo para “responder” a los flujos migratorios que cruzan la selva del Darién con rumbo a Estados Unidos. El acuerdo establece “ayudar” a Panamá a repatriar rápidamente a los migrantes irregulares.
“Reconocemos que la situación en el Darién es insostenible y en muchos casos trágica, y esperamos disuadir a los migrantes a cruzar el Darién que es peligroso”, dijo Marcela Escobari, asistente especial del presidente Joe Biden.
El Servicio Nacional de Migración de Panamá estimó que hasta principios de junio de este año, transitaron 174.513 personas por la selva del Darién. Al finalizar el 2023, la cifra superó el medio millón de personas.
El Departamento de Estado y el Departamento de Seguridad Nacional de EEUU (DHS), hicieron una asignación de 6 millones de dólares para este “plan piloto”.
“Este acuerdo apoyará las iniciativas de Panamá para repatriar de manera humana a los migrantes que no tienen una base legal para permanecer en Panamá”, explicó Eric Jacobstein, subsecretario de Estado adjunto en la oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental.
Las deportaciones se aplicarán “sin tener en cuenta la nacionalidad” de los migrantes. Sin embargo, se revisará “rigurosamente a las personas en riesgo de persecución o de tortura” que no puedan regresar a su país.
Los funcionarios agregaron que además de financiar los vuelos de repatriación, los seis millones de dólares se usarán en el entrenamiento y desarrollo “para fortalecer e institucionalizar procesos seguros y humanos en Panamá”, incluyendo la evaluación de reclamos de asilo.
Se especificó que esto no comprende una nueva ley migratoria, sino el apoyo de las regulaciones migratorias ya existentes en Panamá.
“Panamá ya tiene un proceso de deportación y esto es apoyo”, explicó Luis Miranda, subsecretario adjunto principal de comunicaciones del DHS.
Aunque no se detalló una fecha específica, los funcionarios aseguraron que se espera comenzar las repatriaciones “lo antes posible” en las próximas semanas.
Escobari resaltó que en Panamá ya existen programas para brindar una vía a migrantes que soliciten un estatus legal temporal en el país e instaron al nuevo gobierno a “arrancar” un programa similar que reduzca las tarifas de solicitud para los migrantes. A través de este acuerdo, EEUU busca que los migrantes “hagan uso” de las vías legales disponibles para migrar no solo al país norteamericano, sino a otros países de la región.
Alejandro Mayorkas, secretario de DHS, visitó Panamá durante la toma de posesión del presidente José Raúl Mulino, con quien se “reafirmó” la relación entre ambos países.
“EEUU continúa asegurando nuestras fronteras y expulsando a personas sin una base legal para permanecer, estamos agradecidos por nuestra asociación con Panamá para gestionar los niveles históricos de migración en todo el hemisferio occidental”, dijo Mayorkas durante el anuncio del acuerdo. VOA