
Liaam Winslet del Hospital Elmhuts (ESPY), a la izquierda, conversa con uno de los voluntarios durante la feria para prevenir suicidios. Fotos QueensLatino
Disuadir a alguien con pensamientos suicidas, ayudarlos a superar una crisis o una noche difícil cuando están desesperados, es un tema social, familiar y de salud pública. El suicidio puede evitarse.
Septiembre ha sido reconocido desde 2008 como el Mes Nacional de Prevención del Suicidio con el fin de erradicar el estigma que rodea a la salud mental, fomentar conversaciones abiertas y conectar a las personas con servicios.
El Programa de Prevención del Suicidio en Jóvenes (ESPY) del NYC Health + Hospitals/Elmhurst, realizó su Fiesta Vecinal Anual en Queens para exaltar la Semana Nacional de la Prevención del Suicidio. El evento ocurrió el sábado 6 de septiembre y contó con familias, vecinos y líderes comunitarios.
En Queens, el programa ESPY trabaja activamente en escuelas, centros comunitarios y espacios vecinales para normalizar la conversación sobre el suicidio y la depresión en adolescentes.
“La importancia de estos eventos en nuestra comunidad es para sensibilizar a los vecinos de Queens y de toda la ciudad”, dijo Liaam Winslet, trabajadora de enlace comunitario del Hospital Elmhurst.
Winslet dijo que muchos padres en Queens desconocen cómo ayudar a sus hijos o cómo actuar ante una crisis de salud mental. Además, dijo que este tipo de actividades “aumenta la confianza en el hospital y es muy imformativo”.
El enfoque, según Winslet, es atender las necesidades reales de los barrios: “Hablamos con maestros, padres y adolescentes sobre cómo reconocer síntomas de depresión, aislamiento o pensamientos suicidas. Buscamos normalizar estas conversaciones y derribar los mitos que todavía persisten en nuestras comunidades”.

Helen Arteaga-Landaverde, CEO del Hospital Elmhurst, rodeada del personal de ESPY, políticos y miembros del grupo de danzas local.
Para los organizadores, cada suicidio juvenil es alarmante. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, en el 2022 el suicidio fue la segunda causa principal de muerte entre los jóvenes de 10 a 14 años y la tercera entre los de 15 a 24 años. En la ciudad de Nueva York, los estudiantes de secundaria negros (10%) y latinos (9%) fueron más propensos que los estudiantes blancos (6%) a reportar intentos de suicidio.

Decenas de personas recibieron información y orientación en las inmediaciones del Hospital Elmhurts sobre cómo prevenir el suicidio.
“Queremos que los jóvenes sepan que no están solos, que hay espacios seguros donde pueden hablar y sentirse apoyados”, añadió Winslet.
En el 2024 casi la mitad de los adolescentes encuestados en esta ciudad reportaron síntomas depresivos de algún tipo.
El informe también reveló que en el 2023 el 14% de los adolescentes encuestados no recibió tratamiento de salud mental por razones económicas o falta de acceso.
A nivel nacional, la salud mental juvenil está en crisis y los jóvenes de Queens se encuentran entre los más afectados.
La actividad concluyó con una caminata en honor a los afectados por el suicidio. ESPY, financiado por la Oficina de Salud Mental del estado, ha conectado con más de 28.000 personas en respuesta a la urgencia del suicidio juvenil.
La Línea de Ayuda para Crisis y Suicidios 988 es gratuita, confidencial y está dxisponible 24 horas, por teléfono, mensaje de texto o chat.


